En Buenos Aires

. Hoy miércoles 15, llegamos a Buenos Aires a las 11:00 horas luego de completar lo planificado. Retomando nuestro relato, el lunes, luego de entrar en Internet nos fuimos nuevamente a las termas, ya de noche, y encontramos un grupo hermoso de gente, todos de edad similar a la nuestra, aprovechando la noche estrellada y clima cálido. Cris retomó su charla con una señora que conoció flotando a la tarde en las termas, muy agradable y con una gran alegría de vivir y excelente humor, profesora de castellano en una universidad de Michigan (EEUU)

. Antes de terminar de derretirnos en el agua, pusimos rumbo a nuestra casita rodante para un reparador sueño.
. El martes de mañana, desayuno y levantamos campamento rumbo a la confluencia cerca de Paysandu. Retomamos la ruta 3, pasamos por Salto donde visitamos su cementerio por especial recomendación del director de administración de Arapey y valía la pena por las esculturas que habían. Unos 60 kilómetros mas adelante, están las termas de Guaviyu que entramos a conocerlas y realmente son hermosas por nos quedamos con las de Arapey.
. Unos 20 kilómetros antes de Paisandu, está la entrada a Lorenzo Geyres y allí nos metimos ya pocesionados de nuestro rol de exploradores. Un camino secundario pero asfaltado con pozos nos llevó al poblado, que por ser las 14:00 parecía un pueblo fantasma, sin ningúna señal de vida a quien preguntar algo. Encendimos el GPS y con su ayuda comenzamos a recorrer caminos que nos acercaban al punto buscado y que ya teníamos alguna idea por el Google Earth. Así llegamos a lugar que nos marcó el mínimo: 1,3 kilómetros. Preparé el equipo básico del conquistador de confluencias: GPS, máquina de fotos, buenas botas, coraje para pelear con las vacas que ya me miraban detras del alambrado que tenía que cruzar y luego de un beso de buena suerte con mi colega de aventuras Cris, me largué a la conquista.
. El primer tramo fue bordeando un arroyo y luego a campo traviesa, en algunos lados chapoteando en el barro pero siempre siguiendo el curso que me daba el fiel GPS y acercándome metro a metro al punto mágico. Por fin llegué, saqué las fotos de rigor y a regresar a la base.

. Festejamos el logro de la confluencia y nuevamente en marcha rumbo al puente internacional Paysandu - Colón, que nos esperaba con una impresionante puesta de sol. Ya en la Argentina, avanzamos unos 100 kilómetros más, hasta Gualeguaychu, donde paramos en una Estación de Servicio, una cerveza de festejo y a dormir.
. Hoy miércoles, a las 07:30 otra vez a la ruta y llegamos a Buenos Aires a las 11:30 conluyendo un hermoso viaje. Pura Vida !!!